Que hacer en caso de sospecha de abuso infantil

Descubrir o sospechar que un niño o niña puede estar siendo víctima de abuso sexual es una situación delicada y preocupante. Saber cómo actuar de manera rápida y efectiva puede marcar la diferencia en su protección. En este artículo, te ofrecemos una guía clara sobre los pasos a seguir para proteger a la víctima y asegurar que reciba la atención y justicia que necesita.

¿Qué hacer en caso de sospecha de abuso infantil?

En situaciones donde se sospecha de abuso infantil, saber cómo actuar es fundamental para proteger a los más vulnerables.

Ya sea que la revelación del hecho provenga directamente del niño o niña, de un adulto cercano, o a través de señales físicas y comportamentales, es crucial dar los pasos correctos desde el primer momento.

Este artículo te guiará sobre qué hacer ante una sospecha de abuso infantil, tanto si eres parte del entorno de la víctima como si tienes responsabilidades legales en el caso. La protección del menor y el correcto abordaje de la situación son esenciales para garantizar su bienestar y justicia

Escuchar sin interrumpir: el relato espontáneo del niño

Si el niño o niña decide contar lo sucedido, es crucial no interrumpir su relato, ya que esto puede ser un momento extremadamente delicado. El menor puede sentirse vulnerable y cualquier interrupción podría hacer que se cierre emocionalmente o que pierda la confianza para seguir hablando. Además, es posible que esta sea la única vez que se sienta lo suficientemente seguro como para expresar lo que ha ocurrido, por lo que es vital permitir que hable con sus propias palabras y a su propio ritmo.

En la etapa inicial de una sospecha de abuso infantil, nunca se debe interrogar al menor. Hacer preguntas directas o forzar al niño a detallar lo sucedido puede influir en su relato y contaminar la información. Esto no solo puede dificultar el proceso judicial, sino que también puede generarle mayor estrés emocional. Los menores no siempre tienen la capacidad de comprender las preguntas complejas o de interpretar correctamente lo que se les pide, lo que puede llevar a respuestas confusas o inexactas.

Las preguntas deben limitarse a obtener la información básica necesaria para realizar la denuncia. Solo es recomendable preguntar lo esencial, como ¿qué pasó?, ¿cuándo?, ¿dónde? y ¿quién lo hizo?. Estas preguntas son suficientes para proporcionar la información preliminar a las autoridades, sin comprometer la validez del testimonio. En esta etapa, lo más importante es que el relato del niño o niña sea lo más genuino posible, sin que se le presione o se le induzca a dar más detalles de los necesarios.

Además, es esencial que cualquier testimonio del niño sea documentado con precisión. Si el menor decide relatar lo ocurrido, es fundamental registrar sus palabras de manera textual, para evitar cualquier tipo de distorsión o interpretación errónea. El objetivo es proteger tanto el bienestar emocional del menor como la integridad de su testimonio, que será clave en el proceso judicial.

Primeros pasos ante la sospecha de abuso infantil

Cuando se sospecha de abuso infantil, lo primero que debes hacer es contactar a las autoridades a través de los números de atención telefónica disponibles en Argentina. Estos números están diseñados para ofrecer asistencia inmediata y derivar los casos a los organismos competentes para proteger al niño o niña afectado.

El abuso puede ser revelado de varias formas. A veces, es el propio niño o niña quien se atreve a contar lo que le está sucediendo a un familiar, maestro o adulto de confianza. En otros casos, un adulto cercano puede notar signos preocupantes en el comportamiento del menor. También es posible detectar el abuso a través de indicadores como cambios emocionales, síntomas físicos o conductas regresivas.

Si el menor está solo y no se encuentra un adulto de confianza, es fundamental que se actúe para proteger al niño o niña. En casos donde los familiares están involucrados en el abuso, luego de una denuncia las autoridades deben asegurarse de que el menor no vuelva a un entorno peligroso.

Ante cualquiera de estas señales, es crucial contactar de inmediato a la línea 102, que es el número de atención telefónica especializado en la protección de derechos de niñas, niños y adolescentes en Argentina. Este servicio está disponible las 24 horas y permite brindar contención, orientación y realizar las denuncias correspondientes.

Otra opción es llamar al 911, el número de emergencia, si consideras que la situación requiere una intervención urgente o si existe un peligro inmediato para el niño o niña. También puedes comunicarte con la línea 137, que ofrece asistencia para víctimas de violencia familiar y abuso sexual.

Es fundamental actuar de manera rápida para proteger al menor y garantizar que la justicia intervenga. Estos canales permiten iniciar una investigación y asegurar que se tomen medidas inmediatas para salvaguardar la integridad física y emocional de la víctima.

¿Qué hacer si el abuso se detecta en la escuela o el hospital?

Cuando el abuso se revela en la escuela, hospital o cualquier otro lugar de atención a niños y niñas, es fundamental que se notifique de inmediato a las autoridades competentes, como la policía, fiscalía o los servicios de protección infantil. Estas instituciones están preparadas para actuar rápidamente, evaluar la situación y garantizar la protección del menor. Ignorar o demorar la denuncia podría poner en riesgo la seguridad de la víctima y prolongar su exposición al abuso.

En muchos casos, el niño o niña no hará un relato directo sobre lo que le está ocurriendo. Sin embargo, es esencial que el personal escolar, médicos, enfermeros o cualquier persona que tenga contacto regular con el menor esté capacitado para detectar indicadores físicos o comportamentales que podrían sugerir abuso. Entre los signos físicos pueden estar lesiones inexplicables, marcas o síntomas de enfermedades de transmisión sexual. A nivel comportamental, pueden aparecer cambios abruptos en el estado de ánimo, ansiedad, miedo a ciertos adultos, retraimiento, agresividad, conductas regresivas, entre otros.

Si se detectan estos indicadores, es necesario activar los mecanismos de protección de inmediato, incluso si no se cuenta con un relato verbal del menor. En el caso de las escuelas, es importante informar a los responsables directivos, quienes tienen la obligación de contactar a los organismos de protección y la justicia. En los hospitales, los médicos y personal de salud deben reportar cualquier sospecha de abuso, ya que están en una posición privilegiada para identificar lesiones o comportamientos que podrían estar asociados con maltrato o abuso sexual.

Además, es fundamental que durante este proceso no se interroguen directamente a los menores, sino que se les permita expresarse libremente si lo desean, en un ambiente seguro y sin presión. Todo el personal que esté en contacto con el menor debe asegurar que se mantenga su bienestar emocional y que reciba el apoyo adecuado. El objetivo es proteger al niño o niña sin causar más daño o trauma.

Protegiendo a los más vulnerables

Actuar rápidamente ante la sospecha de abuso infantil es esencial para garantizar que el niño o niña reciba la protección y atención que necesita. Cada acción debe estar dirigida a proteger su bienestar y asegurar que su testimonio sea escuchado de manera segura. La pronta intervención puede marcar la diferencia.

Si necesitas asesoramiento o la intervención de un perito psicólogo especializado en abuso infantil, no dudes en contactarnos. Contamos con un equipo profesional altamente capacitado para brindar apoyo en situaciones complejas.

Sabemos lo delicado que es este tipo de casos, y nos enfocamos en trabajar de manera sensible y efectiva para asegurar la atención y protección que necesita.

Desde la evaluación psicológica hasta la elaboración de informes periciales, estamos comprometidos a acompañarte en cada paso del proceso. Nuestro objetivo es ofrecerte la tranquilidad de contar con expertos que no solo entienden la gravedad del abuso infantil, sino que también tienen el conocimiento y la experiencia necesarios para actuar de manera rápida y eficiente.

Estamos aquí para ayudarte a proteger tus derechos y garantizar que el proceso sea justo y respetuoso. Llámanos y te acompañaremos en cada paso del camino, con la experiencia y profesionalismo que esta situación demanda.