Trabajar con chicos o chicas que se cortan requiere de un compromiso a largo plazo.
Se ha demostrado que la intervención a corto plazo no tiene resultados que persistan, ya que cortarse los brazos es una enfermedad y las cuestiones subyacentes a la conducta son bastante severas y se requerirá varios años de trabajo constante.
Dado que el miedo al abandono es común en la gente que se corta, el paciente tiene que estar seguro que puede apoyarse en nosotros y que su terapeuta estara con él en sus recaídas y en todo.
Se debe estar accesible o no para los momentos de crisis. Esto es sobre todo al principio de la terapia, donde el paciente tiene que saber que cuenta con nosotros en los momento de crisis.
El paciente llega a utilizar esto para poner a prueba que realmente estamos comprometidos con él.
En casos de personas que se cortan, la necesidad de saber que te puede contactar y de contactarte se reduce a la medida en que la alianza terapéutica se fortalece.
Ya más adelante en el tratamiento, su necesidad de contactarte o de saber que nos puede contactar puede convertirse en uno de los temas a tratar en el contexto psicológico.
Trabajar casos clinicos de autoflagelacion en adolescentes implica tener un plan para momentos de crisis o para poder ofrecer sesiones extras.
Psicologia de la Autolesiones en Adultos y Adolsecentes
¿Cuál es la mejor orientación psicoterapéutica para trabajar autolesiones en adolescentes?
No hay una orientación específica recomendable.
Se han reportado buenos resultados con terapias cognitivas-conductuales, terapias psicoanalíticas, y humanistas.
Lo que sí se ha visto que da resultados es cuando el terapeuta tiene la flexibilidad en su técnica.
Por ejemplo un psicoterapeuta psicoanalítico tiene que estar dispuesto a enseñar y monitorear estrategias de manejo de emociones. No tiene porqué abandonar la parte interpretativa de porque los jovenes se cortan, pero tendrá que aumentar algunas estrategias conductuales.
Los ingredientes principales para tener éxito en el tratamiento de la autolesion en adolescentes son: estabilidad, consistencia, confianza y la formación de una liga terapéutica positiva.