Terapia entre padres para reconstruir el Vínculo Paterno-Filial

La investigación ha demostrado que no es el divorcio en sí mismo, sino la cantidad de conflictos asociados al divorcio, lo que tiene los efectos más negativos en los niños. La terapia de coparentalidad es la forma de evitar esos efectos.

Desde el momento de la separación, usted y su cónyuge comienzan a funcionar como co-padres, y la forma en que lo gestionen es de vital importancia para el bienestar de su hijo.

Independientemente de la división del tiempo que se pase con el niño, la coparentalidad en sí es una situación continua.

Si hay conflicto entre usted y su ex cónyuge, su hijo tendrá que enfrentarse a una situación estresante continua a una edad en la que las habilidades de afrontamiento del estrés están todavía en desarrollo.

Los niños a menudo no son capaces de procesar la negatividad entre los padres cuando se prolonga en el tiempo sin fin a la vista. Por lo tanto, el momento de empezar a reducir el conflicto es ahora, nuestra terpia de Co-paternidad Cooperativa es un buen lugar para empezar.

En situaciones de separación o divorcio, donde la relación entre los padres y el hijo se ha deteriorado o nunca se ha establecido, la terapia coparental puede ser una herramienta clave para reconstruir o constituir un vínculo sano entre el niño y sus progenitores.

En algunos casos, los tribunales ordenan esta intervención para asegurar que los padres, aunque separados, puedan colaborar en el bienestar de su hijo, favoreciendo un entorno emocional estable y una relación equilibrada con ambos.

¿Qué es la Terapia Coparental?

La terapia coparental es una intervención diseñada para ayudar a los padres a gestionar su relación de manera efectiva y colaborativa tras una separación o divorcio, en beneficio del niño. El objetivo principal es reducir los conflictos entre los padres y fomentar una cooperación activa que permita el desarrollo de una relación saludable y constante entre el niño y ambos progenitores.

Cuando esta terapia se ordena judicialmente, se busca asegurar que ambos padres participen en la crianza y el bienestar emocional del menor, eliminando tensiones o malentendidos que puedan afectar el desarrollo de la relación paterno-filial.

Cuándo es Necesaria la Terapia Coparental por Razones Judiciales

En el contexto legal argentino, la terapia coparental y la revinculación familiar son herramientas fundamentales para garantizar que los menores mantengan una relación saludable con ambos progenitores, incluso tras una separación o divorcio.

El Código Civil y Comercial de la Nación establece la responsabilidad parental compartida, lo que implica que ambos padres deben involucrarse activamente en la crianza de sus hijos, independientemente de su situación de convivencia.

Asimismo, la Ley 24.270 establece sanciones para los padres o terceros que impidan el contacto de un menor con el progenitor no conviviente.

Los tribunales pueden ordenar la terapia coparental para facilitar la colaboración entre los padres y asegurar que el menor pueda mantener relaciones personales y contacto directo con ambos, conforme a sus derechos reconocidos en la Convención sobre los Derechos del Niño.

Los tribunales pueden ordenar terapia coparental en situaciones como:

  • Conflictos de custodia: Cuando la relación entre los padres está marcada por conflictos que impiden la toma de decisiones conjuntas en beneficio del hijo.
  • Alienación parental: Si uno de los padres ha influido en el niño para rechazar o distanciarse del otro progenitor, afectando la relación.
  • Falta de comunicación: En casos donde la falta de comunicación entre los padres genera inestabilidad en el menor y afecta la relación con uno o ambos progenitores.
  • Reconstitución de un vínculo roto: Cuando el padre o madre ha estado ausente por largo tiempo, y se busca restaurar o constituir el vínculo bajo una supervisión guiada y profesional.

Cómo Funciona la Terapia Coparental en la Reconstrucción del Vínculo Paterno-Filial

El proceso de terapia coparental involucra a ambas partes para que, a través de sesiones estructuradas y guiadas, puedan aprender a comunicar y colaborar en la crianza de su hijo. Los pasos clave incluyen:

  1. Evaluación Inicial: Se realiza una evaluación detallada para analizar el estado de la relación entre los padres y su capacidad de colaboración, así como el impacto que esto tiene en la relación con el niño.
  2. Sesiones Terapéuticas Conjuntas e Individuales: Las sesiones coparentales están diseñadas para trabajar en las dinámicas de comunicación y toma de decisiones conjuntas. Aquí, se abordan los conflictos previos y las barreras que impiden una coordinación efectiva. Además, se trabaja con cada progenitor de manera individual para que puedan expresar sus frustraciones y encontrar formas de colaborar sin conflicto.
  3. Fomento de la Responsabilidad Compartida: La terapia coparental ayuda a los padres a comprender la importancia de su papel en el desarrollo emocional del menor, y a asumir una responsabilidad compartida en la creación de un entorno estable y amoroso para el niño.
  4. Seguimiento y Revisión: A medida que el proceso avanza, se hace un seguimiento del progreso logrado, garantizando que las mejoras en la relación coparental se mantengan en el tiempo, y que el niño pueda desarrollar un vínculo sólido con ambos progenitores.

Beneficios de la Terapia Coparental en el Vínculo Paterno-Filial

  • Mejora la colaboración entre los padres: La terapia coparental ayuda a establecer una comunicación efectiva y a reducir los conflictos, lo que beneficia directamente al niño.
  • Restablece o establece un vínculo seguro: Al mejorar la relación entre los padres, se facilita la reconstitución o constitución de un vínculo afectivo seguro entre el menor y ambos progenitores.
  • Protege el bienestar del niño: Al reducir la tensión entre los padres, se crea un ambiente emocionalmente seguro donde el niño puede crecer sin verse afectado por los conflictos adultos.
  • Promueve la estabilidad emocional del menor: Con ambos padres colaborando, se asegura que el niño reciba un apoyo equilibrado de ambas partes, mejorando su adaptación a la nueva realidad familiar.

Cómo la Terapia Coparental Promueve el Vínculo Paterno-Filial

La terapia coparental no solo beneficia la relación entre los padres, sino que también facilita el proceso de reconstrucción o creación del vínculo paterno-filial.

A medida que los padres aprenden a colaborar y a reducir sus conflictos, el niño se siente más seguro para interactuar con ambos sin miedo a tensiones o conflictos. Esto crea un espacio para que el niño fortalezca su relación con ambos padres, permitiendo un desarrollo emocional más saludable.

Contáctanos para Iniciar el Proceso

Si te encuentras en una situación donde un tribunal ha ordenado terapia coparental o estás enfrentando dificultades para colaborar con el otro progenitor en la crianza de tu hijo, nuestro equipo de profesionales está aquí para ayudarte. Contamos con amplia experiencia en intervenciones judiciales y trabajamos en la construcción de relaciones coparentales saludables, con el foco siempre en el bienestar del menor.

Pone en contacto con nosotros para más información o para agendar una consulta con un terapuetia coparental puede ayudarte a reconstruir o crear un vínculo afectivo sólido entre tu hijo y ambos padres.

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